En la colonia de vacaciones aprovecharon los días no aptos para la pileta para que los niños aprendan a realizar manualidades con hilo y círculos de cartón.
Los chicos hicieron pulseras y tobilleras y quedaron tan entusiasmados con la propuesta que acordaron llevarla a cabo de dos a tres veces por semana.
El pasado viernes 17 fue el turno para otra jornada de aprendizaje, en este caso confeccionando viseras que ahora lucen los más pequeños del programa Pro Vida.
Los niños compartieron esta actividad junto a Carola Macagno y varias mamás, mientras el grupo de niños más grandes se dedicó a la práctica del fútbol.